Hace unos días
estuvimos en Kanpezu, aprovechando el primer fin de semana de noviembre y
últimos coletazos de un otoño que más bien parecía verano. Después, cantidades
ingentes de agua han inundado el paisaje y los árboles han perdido la mayoría
de sus hojas, pasando a ser parte de la alfombra que a partir de ahora cubrirá
los bosques en invierno. Una profunda melancolía me invade siempre durante el
mes de noviembre, como si el cuerpo se preparase para hibernar, a cobijo de la
lluvia, del frío...En ocasiones como esta en otoño, y otras, en las que el
invierno da una tregua, paso del letargo a la acción, y me lleno de naturaleza
cargando las pilas hasta la próxima ocasión.
Este paseo por la
ruta PR 64 alavesa, con ese sugestivo nombre, nos brinda un paisaje precioso
para disfrutar en cualquier época del año. Es suave, en 3 horas y media se
completa la circular de unos 13 kilómetros, que parte de Kanpezu y sube al
monte "La Cogolla" de 1070 metros, pasando por la ermita de ibernalo,
caminando cerca del Pico Costalera y terminando junto al rio Ega.
Noviembre termina y
se acerca diciembre. Los días de lluvia y frío que nos ha brindado este mes han
dejado el otoño temblando camino del invierno. Las hojas desaparecen junto a
sus preciosos colores, los bosques han cambiado, como yo, que me preparo para
recibir un nuevo mes con nueva estación.