Partimos
hacia la "Isla Bonita" el último sábado de octubre, con un oscuro
pronóstico de tiempo en Euskal Herria. El viaje, todo el día, nos llevó de
aeropuerto en aeropuerto, Loiu, Madrid, Gran Canaria y La Palma. A la llegada,
a las 21:30 de la noche, La Palma era un
continuo aguacero, veníamos de una semana de muy mal tiempo, siendo noticia
especialmente esta isla por importantes trombas de agua.
Cogimos
el coche de alquiler asignado, y, ya con noche cerrada y húmeda, llegamos a
nuestro apartamento para los siguientes 9 días en El Paso, lugar céntrico para
las diversas salidas que teníamos planeadas.
El
domingo transcurrió nublado, así como el lunes, lloviendo de vez en cuando,
pero ya la isla nos regaló muchos momentos; Santa Cruz, con esas casas
balconadas y floridas, San Andrés, también en la costa Este, con esas placitas
y casas de colores, y olor a mar, embravecido esos días...Y un paisaje de negro
enfrentándose al mar y al cielo, este último azul y blanco, con las nubes
jugando con el sol. Fuencaliente y su Faro, sus Salinas, y sus volcanes Teneguía y San
Antonio...Tocamos el lunes el Sur de la isla, y ya notábamos la humedad a la
que estamos acostumbrados, con unas temperaturas agradables y una sensación de
gozo en la vista. Había luz en los colores...la lava compartía su lugar con una
exuberante vegetación, distinta, brillante...se me olvidaba. ese verde...
Salinas y Faro de Fuencaliente |
Balcones en Santa Cruz de La Palma |
Piscina natural Charco Azul |
Con
toda esta "aclimatación", vinieron 2 jornadas para el recuerdo. El
resto de días fueron también espectaculares, con la bajada por el interior de la
Caldera de Taburiente, todo un Parque Nacional, gozando del paisaje y de sus
cascadas (La maravillosa Fondada y la de los Colores), las cimas de su cresta
con la llegada al Roque de los Muchachos, y, cómo no, el "vigía", el
Pico Bejenado, el que veíamos todos los días desde nuestro apartamento; pero
estas jornadas no están descritas aquí, necesitaría un día entero para plasmar
todas las vivencias con lo que, me detengo en 2 muy especiales. Roca y mar.
Negro, verde y azul...
Ruta de los Volcanes, por
el Parque Natural Cumbre Vieja
Llegó
el martes, luminoso, soleado. El termómetro del coche marcaba 13 grados a las 8
de la mañana. Salimos hacia la primera parada de taxis para tomar uno que nos
llevara a la zona recreativa El Pilar. Dejamos nuestro coche en La Tajuya,
cerca de El Paso, para luego cogerlo a la vuelta, que haríamos en bus desde Los
Canarios, al Sur, junto a Fuencaliente. La red de autobuses que circulan por La
Palma es bastante buena, aunque sus carreteras no lo son tanto, curva para aquí
y para allá, intentando recorrer su pequeña y rica geografía.
Area recreativa El Pilar |
Comenzamos a ver cráteres, colores distintos de lava, envueltos de vez en cuando en la niebla, a la que siempre ganaba la batalla el sol.
Vista de La Caldera con el Pico Bejenado de verde en primer término |
...y al fondo, Tenerife con la cumbre del Teide |
La niebla nos envuelve |
Tubo volcánico |
Cima Nambroque (1924 m) |
Cima La Deseada desde su gemela |
Ya
divisamos el mar a lo lejos, que nos acerca a nuestro destino. Antes, pasamos
por varios cruces en los que se mezclan rutas locales y de pequeño recorrido
(PR) con la nuestra a través de los pinares. Vemos gente, pero muy poca, y, la
mayoría, alemanes, amantes del senderismo, que no dejan de acercarse a esta
isla. Llegamos a la localidad de Los Canarios a las 14:30, después de 5 horas y
media de caminar sereno y tranquilo. Aquí, un autobús nos recoge dejándonos en
La Tajuya, donde teníamos el coche
Volcán Martín |
"La primera condición del paisaje es su capacidad de decir casi todo sin una sola palabra"
(Konrad Lorenz)
El Norte. Entre El Tablado y
Santo Domingo de Garafía
Un
buen amigo nos recomendó hacer esta ruta, con muy buen criterio, puesto que
lleva ya varios años caminando esta isla, infatigable...Mila esker Suso!
...El
mar nos observa, nos acompaña en esta preciosa ruta comenzando en El Tablado,
pueblito situado a media ladera. Contrastes, rompientes, silencio...
La
llegada a El Tablado fue rápida, demasiado rápida, mareante diría yo. Fuimos
con el coche hasta Puntagorda, y de allí partía el único autobús diario que nos
acercaba al inicio de la ruta, a las 9:15 h de la mañana. Por tanto, a las 9 ya
estábamos esperando en la parada. Pocos viajeros había ese miércoles, y fueron
bajando en distintos puntos de la sinuosa carretera hasta que quedamos los dos
solos...Después de unas buenas curvas por la carretera ancha nos llegó el
momento de agarrarnos fuerte para la bajada, de unos 5 km, hasta El
Tablado...más y más curvas y a toda velocidad. En total, cerca de 45 minutos desde
la salida en Puntagorda hasta la llegada en El Tablado...necesitamos un tiempo
de aclimatación tras la hormigonera...
...Y después, todo fue disfrutar...Se discurre por la
senda GR 130, que es una ruta que circunda toda la isla por la costa. El
Tablado, pueblo pequeño y coqueto, donde hoy en día todavía hay un bar que abre
los fines de semana y entre semana "a veces", como indica su cartel,
y donde se respira una quietud especial, mirando al mar.
El Tablado, paz mirando al mar |
Dragos, cactus, mar... |
Poco a poco, nos vamos acercando a la primera sorpresa
del día, el espectacular Barranco de Fagundo...Bajamos hasta el nivel del mar
para luego, maravillados por la vegetación de dragos, cactus, brezos,
bejeques...comenzar a ascender por un zigzagueante sendero que gana la misma
altura que la bajada desde el pueblo, allí al otro lado del barranco lo dejamos
para, en continua subida llegar hasta el Mirador de La Calzada, que es una
atalaya fantástica hacia la costa.
Camino en zig-zag que asciende por Barranco Fagundo |
Espectacular paisaje Barranco Fagundo |
El Tablado a lo lejos desde mirador La Calzada |
Desde
allí, poco nos queda hasta llegar a Don Pedro, callado, tranquilo, como todos
los lugares habitados por donde pasamos. En este pueblo la senda nos lleva
hacia la izquierda, para entrar en un precioso barranco, lleno de vegetación,
en este caso, laurisilva, que crece en sitios húmedos repartidos a lo largo de
la isla. También pasamos por cuevas artificiales que tienen cerradas sus
puertas, quién sabe si definitivamente...
El Parque eólico Juan
Adalid quita belleza al entorno, y añade mucho ruido al silencio, el que
llevamos nosotros junto a lo que nos rodea. Pronto, el paisaje se abre hacia el
mar y llegamos a la parte alta de la aldea El Mudo, un conjunto de casas,
algunas ya abandonadas, a saber qué historias se habrán tejido allí...
Barranco después de Don Pedro con laurisilva |
Se abre el paisaje de nuevo hacia el mar... |
Lo
mismo sucede con El Palmar, más adelante, donde sí que existe una casa nueva,
impecable, blanca. Hay gente a la que estos lugares engancha para comenzar una
nueva vida. Justo enfrente conseguimos ver las casas de Santo Domingo de
Garafía, a donde llegamos después de 5 horas de marcha, no sin antes salvar el
último barranco del día, el de la Luz, llegando justo a la plaza del pueblo,
donde el sol ya calentaba y donde buscamos una buena sombra para tomarnos una
cerveza, junto a otros senderistas que, como nosotros, han disfrutado de un
bonito día.
Santo Domingo, Iglesia de N. Señora de La Luz |